viernes, 8 de mayo de 2009

ENSAMBLE




 

 

 
 

 

 

 
E N S A M B L E

EPICENTRO

 
Entrada al castillo mirando al cielo

con oxígeno prestado

en los pasillos muertos :

Algún súbdito conduce a las cámaras internas
donde la paz pasajera :



Entre mareo y mareo
criaturitas en jaula de madera
vitoreando a un líder mayor :



                                                               Despréndense ataduras
sondas y mascarillas
sangrando las muñecas agujereadas
hasta encontrar la salida del hospital .

Junto a un parque desde la altura observo :
 
Proyectos ilimitados
son posibles en nombre del pueblo
por veinticuatro horas
multiplicadas por veinte.


Agosto, 2007
Hospital del Salvador





 
A Manuela Del Solar

La armonía que se expande desde tus ojos abiertos
me habla de imperios portentosos
y apelo a ese poder para invocarte
en mi pluma ansiosa de universos.

Matriarca de mis pensamientos de los últimos dos años.
Nueva filosofía de miradas en silencio.

La estela que propagan tus delicadas plantas por las alfombras
del alma
me tienen en suspenso
como si antes de conocerte no existiera nada.

Esta mujer
acaricia mi sombra las veinticuatro horas
pero no importa dónde vaya mi cuerpo
si duerme o se esmera
en proteger sus pasos en la lluvia
como si yo
árbol inmutable
fortalecidas las raíces de la savia proveniente sólo
de la gracia de esta mujer.

Sentado frente a ti, espero
timbales o truenos
y una sonrisa esquiva.

Tus ojos van más allá de mí
distante de cada faro
de toda luz guía.

Me pierdo de todas formas.

 
De qué sirven los faros ante tanto
oceáno regado, cuánto
desorden neptuniano
o qué orden impensado
el de tu
cabellera atada :

Descuélgate de los árboles de la conciencia
Déjate caer por la cascada
te dicen con respeto
con un beso en la mejilla
porque vegetal y corriente
eres propia del deshielo
de las estructuras antárticas
esculpidas en rigor del agua
y su temperamento.

Eres resultado de arenas diseñadas por el viento
que siembran pirámides en esta parte del cerebro
que no puedo ver.

( En esta zona no existen los espejos).

Sentado frente a ti, subyugado
por el color que te releva
abducido en tu arquitectura que desconoce límites
cuando pasas desapercibida bajo algún satélite
instalado por el hombre :

Entonces
que nadie sepa de tu existencia.

Baja de mis árboles, despréndete
de esa blanca
vestidura de sicóloga.

Esta mujer no sabe
que tiene más hijos que la luna.

Esta mujer de baja estatura
me enternece hasta el punto
de envolverme
Ella no sabe que tengo proyectos para ella,
que conozco su historia ha miles de años
cuando la naturaleza sobrevivió a la ira,
cuando quedaron playas abandonadas,
terraplenes de cenizas,
columnas de piedra circulares,
medidoras del tiempo invertebrado.

No sabe que la conservo como un rosario
que acaricio entre mis manos.

Se vuelca como una botella
continente de barcos.

Cada destello de sus haces es volcán.

Ella misma no sabe
que la abrasará con un beso el fuego.

 

ORDEN DE COMPRA

Necesito una ampolleta, un generador, una síncopa,
una buena armadura, un volcán generoso,
una piedra que caiga,
un arco iris antes y no después.

Quiero estar y no ser
Ver el fin no el principio
El cenit de tu seno
El nadir bajo tu falda.
 
Que no me baste la guía de teléfonos
Quiero una agenda primaria
que empiece con tu nombre :

Insisto :

Una armadura una insignia un pendón
un clarín llamando a la batalla
para tomar posesión
de la palma hasta tus plantas.

 
 
CONJUNTO NATURAL


El silencio
adquiere su mejor sentido
cuando estalla en grito :

Verdeazul las alas
disecadas.

Elemento de una colección extraña.

Conjunto volátil que alguna vez cruzó la ventana
diagonalmente
cayendo
hasta el patio húmedo
de hojas pisadas delicadamente
por pájaros alertas al próximo aliento
semicálidas de papel de arroz
de la naciente primavera
que cierta vez traspuso el hemisferio
para saludar
y despedirse
como salto de astronauta
como lava destruyendo y haciendo germinar
lo muerto aún.

Una cosa por otra :

Todo es desechable
Poseo un conjunto de especies que quiero intercambiar.
 
Qué te parece ?
Comencemos por abrir la ventana.



AQUÍ YACE LA ECUACIÓN
Aquí yace el pescado mal oliente.
No será tiempo de cambiarnos de caverna ?
Quién lo impide ?
Dios ? No
El hombre ? Sí.

El hombre minúsculo aún no aprende a caminar
Recién asoma la cabeza.
Acá yace la pobredumbre humana
bajo la pala implacable
del horadar del tiempo sobre piel.
Palabra muerta
que no dijo nada o habló demasiado
para dar cabida a borbotones
a la poesía que no necesitó escribirse.
vive en el latido del quehacer instalado
en la madera del gesto diario
cuando va y viene el paso disciplinado
de la sangre al molino cerebral
marcando el ritmo de los órganos
espectantes
para pacer la noche.

El esperado descanso de completar el ciclo
del agua
desde abajo hacia arriba
concluyendo :

Para nacer es menester crear
una rutina normal.
El principio de la energía
de quienes siembran alegría
o mueren trágicamente.
Así yace la ecuación
estado sobre estado
sobre la geografía.
La creación de la sangre no requiere
derechos de autor.
(Aquí Dios hace un silencio).




CARBONO

Hay palabras que
van martillando.
No llevo por costumbre
papeles en los bolsillos, ni es mi oficio
deambular por bibliotecas
pero es lo que hago
inevitablemente.
Mis palabras se leen, a veces
en los cuartos de baño
como lectura al compás del tabaco.
Esta medida cuántica
diferente a los sonetos conocidos de las rocas
delata a las eras.
La erosión habla :

Carbón, carbono
ya no me sirves.

Ahora debiera estar yo alimentando a los piratas.
Hay que sacudirse como los perros
del agua contaminada
y las influencias que no conducen
castran.

 
Recordar que somos privilegiados.

El lienzo es blanco :

Pintar y tirar
la casa por la ventana
antes que llegue el aparecido
que nos gane el quien vive
de los revolucionarios.

ANAQUEL

Sólo hablo de espacios solo.

Junto a los libros
comparten repisa unos sobres
de sopa esparcidos en el mismo anaquel.
Para no perder el tiempo
algunos periódicos desvencijados
y una que otra revista de proyectos inconclusos
de mi próxima habitación.
En el mismo andamio
un paquete de azúcar y una caja de huevos.
Medicamentos para no perder el juicio.
Y acomodada junto a la pared blanca
toda la ropa sucia
que se renueva
según la presión del agua.
En el piso de tablas a medio encerar
tirada la ropa sucia
que reciclan mis buenas hermanas :

Debo un monumento en el centro de la plaza
para devolver la mano a toda la gente santa.


 
RIO PUELO
Bajé
para bañarme en el río frío
con jabón verde de profundos bosques.
Esponja que fluye
empedradura
de volcanes.
El río viene de la foresta pidiendo
una voz metálica.

Viene de esmeraldas arrancadas del torrente,
curso que nunca llegó
a desembocar sobre la historia.
Metal sobrevolando en forma de avioneta
invadiendo el país de las manzanas.
Los lobos en representación de las ballenas
enfilando al estuario nos saludan
dándonos la bienvenida.
Río Puelo, una iglesia y un panal de alerces
Una alfombra mullida de humedad verde
La chicha de manzana brotando de tarugos
madereros.
La madera es recurrente
para un cálido estar
al compás de olvidos diferidos
de un periódico anacrónico.
Una cocina alimentada de rumorosos
leños
extasiados de cordero.

ULTIMA VOLUNTAD

No tengo tiempo de decir la última palabra.
Sólo merezco un suspiro
y tal vez deletrear tu nombre :

Manuela,

Tú sabes lo que pasa.
 
Hay momentos tangenciales
donde lo cuotidiano transcurre
como oleaje entre laberintos
de palafitos, mansamente.
 
Hay instantes en que
ángeles como tú generan universos,
dosifican la creación sonrisa a sonrisa.
 
Tu mirada de encantos preñada
haciéndote más hermosa aún
como sirena fugada
de navegantes solos
que añoran a una mujer esperando
como Penélope tejiendo
las redes del aposento,
concluyendo
inconclusiones.


 
AZAR
 
Encontrarme con mujeres como tú, de improviso,
me produce vértigo.
 
Tu máscara de tristeza,
hoja entreabierta que sugiere patios a la vuelta de la esquina.
 
Los corredores que albergan patios me doblegan
y si el patio huele a ti y tiene
el verdeazul de tus delicadas venas
queriendo aflorar bajo tu pálida piel,
prisionero me declaro para tenerte cerca.
 
Máscara de tristeza :

Rojas tus llagas de pasiones aferradas
Oscurecidos tus trigales por exceso de sol
Ajadas tus manos de quehaceres y escasas de caricias lubricadoras
Descuidadas tus ropas postergadas
Cabizbaja la postura de tus ancas
Amuecada la sonrisa, perdida en algún rincón del patio.


Mi voz no se oye pero cuánto te busca para ser escuchada
Cuántos besos rocian tus palmas
Cuánta luz contenida para vaciarse en tus entrañas.

Inesperadamente
dejas de ser repentina
y te grabas
en mis despertares solemnes.
 
Hago callar cualquier otro silencio
Doy espacio a tu extensión
Déjote ser sin contratiempos :


Deambula
No te molestes en disculparte
Tu presencia no requiere protocolos
Hasta que yo te diga
Hasta que yo te nombre.

Por lo pronto dispones de mis cinco -
no te digo cuatro
no te digo tres
no te digo dos -
sentidos.
 
Tus ojos tristes son
mi único motor.

 
RUDIBANDA
Tu ondulada figura me envuelve en espirales
aladas
que he adoptado
desde que tu morena piel se aferrara a mi costado
entre sombras crepusculares.
Y qué decir de tu grácil
lino
blanca harina
pan transparente
moldeando tu cuerpo
tan amado.

 
SOLFEO

Básicamente versos
sucediéndose en palmas
acotadas.

Disciplinada entrega
Largo rodar por la empedrada
a escala humana.

Vi objetos sudorosos de madera
Los vi pasar desde fuera.
Eléctricamente síncopas
tropezándose
enlazadas.

Cítaras
Atmósfera liviana
Dulce canto meridional al regazo de una guitarra.
Vi objetos sudorosos de madera
Los vi pasar desde fuera.

 
Me adentré :
Cada lomo me llama
Cuero y pita
tinta
metódica proclama.

Los brazos abiertos no alcanzaban a medir la feria del viejo libro
y sus artefactos
olvidados.


ALADAS

Gruesas catedrales óseas
Los brazos por balanceo rodean al cuerpo caderesco
alando.

Externamente
sólidas mujeres
mas
debilitadas adentro.

Naves a lo largo
emigrantes eternas ritornando niente.

Ensenadas a lo ancho
acogiendo buques paralelos
de carga interminablemente pródiga
que un muelle requiere para ordeñar sus fuelles.

En profundis, sabrosa humedad
palpable en filios de pianista concertino.

Humedad caliente
Piel volcánica
Esófago ballenesco.

Y en lo etéreo un halo
de hospedaje
en casinos cavernosos.

De riquezas saudade.

Luces cubiertas con beduino velo
del desierto el centro.


 
LA LUNA ERA TAN GRANDE
 
La luna era tan grande
y la ciudad tan cerca
de los astros
o nosotros alejados de la tierra y sus vaivenes.


PLEAMAR

Cuando es plena la marea
convoco a tu espalda y su derroche
horizontal de flancos
hendida por el meridiano de un beso
a lo largo y ancho
de ti
abierta
separado tu esqueleto
a mi voluntad cediendo
desde la cumbre hasta tus pozos
infinitos
viscerales
de humedad caliente
resina maderera
panal de corrientes acuáticas celestes
marinas de la fuente verdeazul de tus playas
calmas
después del huracán
que te vio nacer
de un plumazo de bandurria.

Absorto llego a tus alelíes.

Qué más puedo decir desde los parques ministeriales
cuando te vas en bicicleta por los carriles municipales
del buen alcalde que honra ayuntamientos.

De un plumazo de bandurria
vuelvo a la madera y al traslapo del alerce
cuando jóvenes
arquitectos creíamos
que la poliscracia
en fiesta estaba
y festinábamos en el río
adormeciendo nuestras cabezas
embosquecidas
mariscadoras
de vencidas conchas.
 
 
 
ARCO DE TRIUNFO
 
Un mágico domingo en la provincia

se resume viendo :

Dónde pasar la noche

a cientos de kilómetros de la propia cama.

La sección de baños

Los jardines techados

La mesa de las próximas

tres comidas diarias.





No pisar el escudo de baldosas bajo el arco de acceso.





Morbosamente en los patios de la morgue

alguna ventana abierta

para atestiguar cómo se seccionan cadáveres

con acádemicos fines.



Confusión de delantales

blancos.

Luego escabullirse entre las moles de piedra

y ver aquella imagen que nunca se ha borrado

sobre metálica camilla un cadáver hinchado

saturado en formalina, putrefacto.

Son los restos de la democracia.





La vida en una pensión es llevadera :

Se venden textos de matemáticas

cuando el dinero falta.

Se compran biografías vienesas y filosofías

ecce homo cuando sobra.



Los días de lluvia son otra cosa :

El agua rebota hasta las rodillas.

Primer contratiempo :

No hay zapatos de recambio.




 

ALGUIEN PREGUNTA POR MÍ


Un limón en húmedo recodo

interrumpe el estornudo

de unas vísceras saladas,

se vuelve sabrosamente resbaloso

y rueda por las calles.





Alguien de túnica oculta sus llagas en la noche,

lleva en su bolso una botella de aguardiente

y practica ordinarios gestos que aprendió recluida,

viuda de esperanzas.





Se arrima a cualquier sombra poderosa

que porte una billetera contundente

y le ofrezca amplia cama.



Comparte turbios humores

con quien se cruce en su rodar,

se hace amiga de la fealdad

y es capaz de incorporarse en medio de un concurrido salón

para vociferar su hastío mordaz.





PROYECCIÓN GEOMÉTRICA
 
Proporcional inversamente

me alejo de tu iglesia

y me acerco a mi dios.





AUTO RETRATO

Aparentemente oscura

pero a los rayos expuesta

la cumbre dorada fluye

en filamentos.





Tenazas los brazos madrugadores

y en el crepúsculo un ruego

convocatorio de epopeyas

transversales del cuerpo

migratorio

despúes del himno final.





No quedaron restos

desde esta orilla

ex

h

alada.


 
MI PROPIO YO

No es ésta la casa diseñada ni la iglesia que anhelábamos.


Nunca nadie sabrá que estuve extrañando el mar

arrastrando piedras desde la cantera.





En todo este tiempo de no dejarme ver estuve

multiplicándome.



La belleza final es armonía de las pequeñas piedras

yuxtapuestas en su propia belleza.





Cada elemento del arco

se sostiene por sí mismo y entre ellos

dependiendo de los otros.


 
Pero si no tengo cuña que sea mi eco entonces

debo cerrar los ojos y reconstruirme,

reincorporar mis pilares,

reinvindicar mis cadenas,

guarecerme en el techo primario,

fluir en mi propia sangre.

 
Nunca nadie sabrá que soy muerto tres veces

y tres veces vivo

estoy.

 
No sé si es el sonido del mar

el que me mantiene lejos

pero siempre me dejo llevar

por las olas.



PREGON INICIAL

Al Andalus me aproximo

taconeando

batiendo palmas generosas

arremolinando faldas

apiernando ancas.

 
Al Andalus añoro

al desplegar sabanas y sábanas

blancas y púrpuras

y no encontrarte llana y sonrojada.


 
Al Andalus con alas tal ángel

me propago por españas

portando espada y escudo

de arcángeles con sotanas

en bendita suerte condenada.


 
Gitano soy y me aborrezco

por dejar tierra desolada

esposa yerta

hijos a la deriva

de mi gracia acorralada.


 
Al Andalus voy tras gitana

traicionera de amores

mas fiel en tablaos

para armonizar mi desgarro,

lisonjera ,

madrigal en los mercados,

celestina de cahuines en rouge,

fogata de los puertos ,

abierta ensenada

para los vientos

eyaculadores.


 
UNA CARGA MENOS

 
Qué más quisiera yo, hijos

desprenderme de esta carga. Admito

que escapó de mis manos la palabra

como si el verbo dependiera del alma

no de mí -

pendiera de la historia como un reloj.



El tiempo no es asunto sólo de los físicos :

Patrimonio, arte

de no caer al libre sueño de remontar arrecifes

batiendo los pies.



Por qué insistes, hermano, en renombrar lunas y acotar silencios,

multiplicar fetiches en la sombra.



La retórica excesiva es propia de indocumentados.

La poesía pura es nuestra.

Los vespucianos nosotros.



La palabra continente como un todo :

América,

que la compren otros.



 
ENDILGANDO


Endilgando

hacia la cordillera inexpugnable.

 
Para este tipo de empresas

no necesitamos interlocutores

ni iglesias, avales, recolectores de ofrendas,

declaraciones juradas ni funcionarios públicos.

 
Para este tipo de empresas

no necesitamos nada.



 
LO


Lo ecuatorial

Lo ser naciente

Lo litoral

Lo feudal también

Lo pertenencia

Lo lugar

do moriré.



Abierta es la estepa

como libre y mortal el desierto.


Mi cabalgadura es cómoda mientras me lleve a la extremadura

al límite

do no es tiempo de constataciones

sino

de constelaciones.


 
FLANCO DEL INCONCIENTE


Niño, navega

en líquido placentero.


Engulle espacios

hasta alimentarte un día

de tus propios océanos.

 
Niño, hasta la cumbre

Observa - soy majadero.

Coge de un plumazo

amable por cierto

la maravilla.


Quién está bajo mis plantas ?

 
No me confundas con estas preguntas

Pobres serán las respuestas.

 
Heme aquí

en acantilados

con alimento de sobra

con alas sobredimensionadas

para la brisa que domina.


Los meteoritos silban de espanto al cruzar la bóveda.


 
FLOR INTERMITENTE
 
Flor nevada

sonrojada violeta

pálida,

en todas partes estás :

 
Frente a mi lar de turno

una vez cada tres árboles

donde te puedan ver.


Púrpura flor racimo

en mis abiertas heridas

te apareces cada tres años

en el desierto florido.


Estoy por concluir

que eres la misma flor

con diferentes relámpagos.


 
APRENDIZAJE

Se hace necesario ir descartando lastre

para aumentar altura.


Tropezando la mañana

con el sol en lo más alto

resbalando hasta la playa

por el tobogán de arena.

 
Paciente, mantengo el objetivo.

Huelo el sudor del equilibrio.


Al avanzar sobre el agua

con cada brazada cojo

un puñado de universos

adecuando el derrotero.

 
En el horizonte

un punto de fuga me sirve

para concentrar la mirada

y postergar la fatiga.

 
Desesperanza no tengo.

No hay plazos que cumplir.

 
En el desarrollo del viaje

disfruto indolente

esta seguidilla de eventos naturales

hacia el conocimiento eterno.


 
OFRENDA DE LUZ PARA LOS DONES

Mirada
Introspectiva
a nuestras
Revoluciones.



Arriba, liviano
Vamos a la batalla ¡ "


Todo transcurre entre zarzamoras
ad portas de la muerte
mas morir es relativo :
Vidas cortas
Lentas muertes
innecesarias
ondeando por barrios aledaños
donde convergen
estudiantinas,
hipismos
y pelotuciencias.

Respuestas evasivas es la contesta
Relevos
hacia el arco de bienvenida al barrio universitario.


Inmaculada concepción
en
la sombra del campanil
a horcajadas sobre el lomo de un cisne.

Avanza el tiempo
regresivamente.
En cada esquina emana
subterráneamente
pestilencia de animales,
reciclos,
desfloración de luces
post parto.

Previamente la copa debe vaciarse
de esos humores ambiguos
y reaceptar estos otros líquidos.



Concepción, 1971

 
NUTRIENTE

Me nutro de tus ojos
Busco tus fuentes de agua
y si reconozco en alguna mi genealogía,
permanezco alerta
para capturar el código de tu hechicería.

Mi relación con el agua se transcribe en la nutria
tórax a tórax contra cielo
alimentándose de conchas
plácidamente.

Me nutre el mar desde la prudente
distancia sobre el nivel horizontal de modo
visualizar cada una de tus carreritas
entre la playa y la rompiente
ola imprevisible.

 

REMINISCENCIAS

DE UN VIAJE FAMILIAR A VALPARAÍSO


Tu sangre y la mía
en comunidad tienen
un río subterráneo,
secreto amor
que por profundo late
calladamente
para explosionar un día
volcán postergado
o dormir para siempre amordazado.

Mi sangre y la tuya
se conocen de antes nacer nosotros
cómplices de no sé qué circunstancia
no vivida :

Sabes de mis dolores
Instuyo tus debilidades.

Diferentes soledades :
Tu silencio me requiere
El mío te reclama.

Quién sabe si es correcto
que mis versos te abracen
como si fueras mía
desde que un puente se posara
entre tu infancia y la mía
algo mayor entre estaciones
ferroviarias :

BARON PUERTO
MAPOCHO RIO.
Volviendo de Valparaíso
con respeto y al respecto
de nuestras viudeces respectivas.

 

El Llano Subercaseaux, Enero 2009





 

HEMISFERIO


Perpendicular sobre el vacío
vertical sobre la tierra
crucé frente a la divina
providencia
y no emergieron luces subterráneas.

Mi hemisferio desierto no reclama interrupciones,
llano se vislumbra
en acoger pies de mora sobre papel de arroz,
mujeres de ensenada generosa
de medina
esperanza.

Llenándose va el bebedero
con cada ventana abierta
vereda pavimentada
mar en la retina
mujer atesorada
sanguíneos encuentros
sincrónicos
artificios dispersos
disfunciones
revividos trayectos
parábolas no formuladas
múltiples horizontes en silencio.






CARICIA

Sobre la palma de mi mano izquierda
emerge una montaña que no puedo explicar ahora
que me duele de alguna explosión
que arrebola y hace volar rosas
en los jardines de tu templo carnal.




CUÁNTO TIEMPO

Cuánto tiempo es necesario
para capturar la imagen
de tus leves colinas

expuestas
a la brisa del próximo crepúsculo ?



APARICIÓN SOLEMNE

Viene subiendo hacia la terraza donde estoy

un amable taconear

llevando al frente dos profundos

verdes embrujadores.

En el preciso instante que cambia de pierna

antes de abordar el próximo escalón

su mirada detiene el tiempo en la mía

y somos un solo silencio

abrasador.



Desde entonces puntualmente le hago guardia

a esa aparición vespertina

entre la brumosa tarde de siempre

y la complicidad del sol algunas veces

que se cuela por la caja de luz de la escalera.


Estas débiles estructuras metálicas

soportan descoloridas tierras rojas

que conservan historias de gente que se ha ido

y acogen nuevas venas que fluyen

en estas tardes que se apagan

para despertar mañana

con una sonrisa

algo madura de mi parte

y morena de la suya.


 
DICEN QUE MI PADRE

Dicen que la música
viene de la calle
de los cerros
del mercado
del desierto
del silencio de mi oído izquierdo.

La diestra del todopoderoso está vigente.

Dicen que posarse
sobre un nido de águilas, con intención
de robar un huevo,
es peligroso.

Yo debiera recordar a mucha gente
pero obligación también es hablar de los caballos
leales y seguros ante el abismo
rienda para acá, en vano
rienda para allá, trote sosegado.
El caballo sabe lo que hace.

Dicen que mi padre traduce el canto de los pájaros :
Qué será de mi tío Agustín ?


El de más arriba pregunta por su madre
El que sobrevuela marca el territorio
del camposanto
junto al desguazador de barcos.

Los pelícanos saben que mi padre está cansado.
Entonces esperan que tome su tiempo
en preparar la lienza y su carnada
pesca altiva.

Otrosí :


Mi padre volantinero
encolaba hilo entre dos árboles
para coger al pez rey del ciel